Enero: El equipo sigue su paso irregular en la Segunda División. Empieza a haber gran movimiento en el mercado de invierno teniendo muchas bajas y altas de jugadores.
Febrero: Seguimos con la dinámica irregular del equipo, a lo que se le suma la marcha del club de Morgado, el último responsable que quedaba de la confección de la plantilla.
Marzo: Un nuevo cambio de entrenador en el primer equipo, esta vez David Vidal sustituye a Rubio y, aunque se nota su mano, no consigue enderezar a la plantilla en las primeras semanas.
Abril: Poco a poco se nota el trabajo de Vidal y el equipo empieza a despegar, aunque todavía le cuesta hacerlo con soltura.
Mayo: Se empiezan a contar los partidos por empates y victorias, olvidándonos de las derrotas durante algunas semanas.
Junio: Permanencia final aunque con demasiado sufrimiento, y eso que se podría haber conseguido antes de la última jornada.
Julio: David Vidal decide no renovar su contrato y llega Antonio Calderón. Antes de esto, la afición del Albacete Balompié demostró que también sabe estar en las malas, aunque sea en un número inferior al deseado. Empieza a haber una remodelación radical en la plantilla predominando la austeridad.
Agosto: Muchos jugadores a prueba pasan por la pretemporada del Albacete Balompié, la cuál no está destacando sobre manera, además de los muchos movimientos de mercado que hay.
Septiembre: Comenzamos la temporada como siempre, sembrando dudas. Además, se demuestra con el paso de los partidos que la plantilla está bastante descompensada y que habrá que hacer un esfuerzo en el mercado invernal.
Octubre: Tras enderezar el comienzo de temporada y situarnos en puestos medio-altos finalmente empieza una caída libre con unas derrotas detrás de otras.
Noviembre: Nos situamos colistas tras una serie de derrotas consecutivas y empiezan los primeros rumores sobre la rescisión de contratos de Kandol, que aún no ha debutado, y Pipino Cuevas, que ha dejado mucho que desear.
Diciembre: Se demuestra que el Albacete Balompié tiene equipo para estar fuera del descenso de sobra con buenos partidos, aunque a los resultados les cuesta llegar, lo que hace que Calderón sea cuestionado por la afición cada semana. Además, empezamos otra vez con la locura de entradas y salidas en el mercado invernal.