Al finalizar la pasada temporada se decía, se rumoreaba, se comentaba que quizás el resultado del último partido entre el FC Cartagena y el Albacete Balompié ya se conocía antes de jugarse el partido. No el resultado final pero sí de qué lado iba a caer. Yo, realmente, es algo que no puedo asegurar a ciencia cierta, pues en estos temas nunca se sabe la verdad al 100% y son situaciones tan pantanosas que nunca se puede pasar de la presunción de dichas informaciones.
El caso es que este sábado nos volvemos a encontrar frente al grandioso equipo cartagenero en una situación, quizás ni siquiera similar, pues es algo más trágica, sobre todo para nosotros, pero sí nos recuerda a dicho partido de la pasada temporada, al estar nosotros luchando por la permanencia y ellos por el ascenso, algo que el año pasado, por desgracia, no pudieron conseguir, de ahí el resultado ya mencionado.
Dada la situación en la que nos encontramos inmersos hay gente que piensa que es un buen momento de devolver el favor y echar una pequeña mano a nuestro próximo rival, pero es que aún pensando que eso sería lo "correcto" (recordemos que ese "correcto" seguiría siendo un amaño de la competición) aún no podemos dejar de luchar, a pesar de saber que vamos a morir, como muy cerca, en la orilla, algo que no puede hacer que dejemos caer los brazos pues, aunque remotísimas, imposibles, soñadas, aún quedan mínimas posibilidades.
Debemos acoger a la afición cartagenera como ellos hicieron en su casa hace casi un año, si no mejor aún, volver a sentir esa comunión entre aficiones (aún recuerdo la anécdota de un cartagenero y yo criticando juntos al Real Murcia y alabándonos mientras sacábamos ambos dinero de un Caja Murcia, algo que nos resultó curioso y bastante gracioso) y poder disfrutar de un gran partido entre ambos equipos, pero tienen que perdonarnos la deuda esta temporada y comprender que es uno de nuestros últimos clavos ardiendo, por no decir el último, porque los demás ya los hemos ido soltando las jornadas pasadas. Seguro que podremos devolverles dicha deuda en tiempos futuros, con mejor situación del Albacete Balompié, pero deben comprender que este sábado no es el momento.
Será una de nuestras últimas fiestas en el fútbol profesional, de momento, así que tendremos que disfrutarla como mejor podamos. Solo espero que los jugadores decidan acompañar en dicha fiesta.
Por cierto, en el pasado artículo se me olvidó mencionar un nuevo buen debut de un canterano en el Albacete Balompié que, para más casualidad, es cartagenero. Es Gonzalo, un central de futuro que seguramente sea uno de los que tire del carro el año que viene en Segunda División B.