Y no me refiero al ofrecido por el Albacete Balompié en Balaídos, ya que al menos arañó un punto y demostró tener equipo para más, pues se tuvieron buenas oportunidades marradas, incluido un penalty que no trasformó Salva Ballesta. Es una pena el no haber conseguido los tres puntos frente al RC Celta de Vigo, pues nos habrían venido muy bien, aunque quizás habría sido más fácil si la actitud de Pepe Murcia fuese otra, pues no es muy normal que disponiendo en el descuento de un corner a favor, con un empate en el marcador, se use esta acción para perder tiempo en vez de para intentar remachar un buen resultado. En fin, una sensación de cagón y miedo es lo único que deja esa última jugada.
El espectáculo al que me refiero es al que se ofreció tanto en el túnel de vestuarios como en la rueda de prensa, los protagonistas del primero fueron los futbolistas y del segundo fue el entrenador.
Según se relata entre el acta arbitral, testigos y prensa, parece ser que al finalizar el partido algunos jugadores se enzarzaron a puñetazos y amenazas en la bocana del túnel de vestuarios del estadio vigués. Entre los implicados están Antonio Notario y Trashorras (confundido en el acta arbitral con Catalá, ex del Alba) que tienen alguna rencilla pendiente de cuando la pasada temporada eran compañeros en el RC Celta de Vigo. Según unas versiones, el portero esperó al centrocampista y según otras versiones fue al revés. También está implicado el segundo entrenador vigués, que amenazó de muerte al portero según una versión, que pegó puñetazos según otra versión y que solo quiso separar y recibió un puñetazo según la suya. Sea como fuere, empezase quién empezase y acabase como acabase, espero que por parte de
La segunda de la tarde fue cuando en la rueda de prensa Pepe Murcia insultó varias veces a un periodista vigués con el que tuvo sus más y sus menos en su estancia en el club gallego. No fue ni el momento, ni el lugar y, menos aún, las formas, pues en ese momento estaba representando al club Albacete Balompié S. A. D. y no a su persona. Lo más lógico hubiese sido que después de dicha rueda de prensa, en un apartado hubiese hablado lo que tuviese que hablar con ese periodista a título personal. Fue una rajada patética y vergonzosa por parte de nuestro entrenador.
Ayer mismo ya pidió disculpas públicas reconociendo que en ese momento afeó la imagen del club, seguramente tras alguna reprimenda del Presidente Rafael Candel.
Hoy se sabrán las sanciones para cada uno de los implicados en la pelea en el túnel de vestuarios y seguramente para Notario, el que nos toca más de cerca, sean de cuatro partidos o más.
En cuanto a Pepe Murcia, más vale que este domingo corrija el rumbo del Albacete Balompié, pues si no, aparte de los malos resultados es muy probable que la metedura de pata le pase una gran factura en el futuro. Con buenos resultados se olvidará dicho error, con malos resultados estará presente siempre el error.