Tomamos Córdoba

Por fin empezamos a soñar realmente con hacer algo más que aguantar la permanencia en las últimas jornadas y sufriendo. Al menos salvarnos con tiempo de sumar puntos para acabar en una posición más que decente.

Julián Rubio ha puesto las pilas al Albacete Balompié y está trabajando ahora todo lo que no se trabajó en su momento, lo cuál se demuestra en los resultados, ya no porque hayamos ganado los dos últimos partidos, cosa muy importante, si no porque además hemos mantenido la puerta a cero.

Con la misma plantilla desde principio de temporada Rubio ha conseguido organizar una defensa segura y expeditiva, con la que no encajar goles y con la que el peligro ya no llega con las jugadas a balón parado. Y eso se consigue solamente con mucho, mucho, mucho trabajo.

Frente al Córdoba CF conseguimos el segundo partido consecutivo sin recibir goles, eso sí, con un inicio embarullado donde predominó la imprecisión en los pases en el centro del campo entre ambos equipos, pero con el ataque letal que tenemos es solo cuestión de tiempo que llegue el peligro en los partidos, siempre que mantengamos un orden en el centro del campo y en la defensa. La defensa, la mejor línea a lo largo del partido en el Nuevo Arcángel en la que destacaron Pablo Gil y Tarantino, haciendo ambos uno de sus mejores partidos desde que están en la primera plantilla del Albacete Balompié. Además, recordemos que el Córdoba CF no había perdido ni un solo partido en su estadio en todo el año 2009, lo cuál aumenta el mérito de esta victoria.

Acabamos el año con ilusiones renovadas, viendo como realmente sí hay equipo para más de lo que se había mostrado hasta ahora y, quizás, si se consiguen un par de refuerzos en la defensa (dígase en forma de canteranos o de fichajes) se pueda soñar con algo más.

La nota negativa de la semana ha sido la protagonizada por Vivar Dorado, al que finalmente se le ha comunicado que no se va a contar con él para lo que resta de temporada al no estar recuperado de su lesión. Una lástima porque perdemos a uno de los jugadores con más calidad que había pasado por el Albacete Balompié en los últimos años sin que haya podido jugar ni un minuto con la camiseta blanca. Afortunadamente para el club no ha costado ni un euro pues el acuerdo al que llegaron es que no empezaría a cobrar hasta que no jugase y que su estancia en Albacete se la costearía él de su bolsillo. Tampoco ha quitado el puesto a ningún jugador pues aún con él en la plantilla sobraba una ficha.

Desde aquí desear la mejor de las suertes a Vivar Dorado y espero poder verlo jugar de nuevo al fútbol, y si pudiese ser en el Albacete Balompié sería mucho mejor.