Temporada fracasada

Ayer se “oficializó” el fracaso deportivo de esta temporada con la salida del club de Sergio Morgado, la última cabeza visible que quedaba tras las salidas de Miguel Ángel Ruiz y Pepe Murcia. Su salida estaba cantada tras conocerse las reuniones entre el Albacete Balompié y Antonio López Alfaro ofreciéndole el puesto actual (hasta ayer) de Morgado.

Todo este tema no hace nada más que ratificar que el club debe optar simplemente a la permanencia y, además, de forma sufrida, y no al ascenso como se vendió a principio de temporada. De toda maneras, es algo que ya llevamos unos partidos viendo, pues de los últimos 5 partidos hemos conseguido 4 puntos (4 empates y una derrota) siendo el último el más desastroso, ante el Real Unión de Irún, con una derrota en su feudo ante 9 jugadores y con una alineación con la cuál se perdió el partido antes de empezar a jugarlo, con Alberto de lateral derecho, Bizera de central titular y Salva en el banquillo. No sé, pienso que el equipo estaba funcionando, sobre todo en la zona defensiva que es lo que más nos costó arreglar y no se debería haber modificado nada que funcionaba, por lo que creo que Julián Rubio se equivocó completamente, pero en fin…

Hoy, además, en la rueda de prensa para la despedida de Morgado del club, el Presidente Rafael Candel ha comunicado como está la situación económica, la cuál es desastrosa a día de hoy, por lo que se ha tomado la determinación de mañana acogerse a una situación preconcursal para intentar llegar a un acuerdo con los tres mayores acreedores de la entidad (Hacienda, Seguridad Social y Ayuntamiento de Albacete) y tras ello realizar un recorte en todos los gastos superfluos del club, empezando por rebajar drásticamente el presupuesto para la próxima campaña, es decir, a partir del año que viene nos toca una larga peregrinación por el desierto, lo que viene a ser fichar todo lo más barato posible, desconocido y mucho de Segunda División B, además de tirar mucho de cantera, e intentar que la deuda se vaya rebajando al máximo.

Mientras que se consiga la salvación del club, soy uno de los que no le importa tener que estar en divisiones inferiores para volver a ser algún día el gran Albacete Balompié que fuimos.