miércoles, enero 23, 2008

¿Qué hay de nuevo viejo?

Y volvemos a ponernos el mono de trabajo y a dar más opiniones sobre éste, nuestro equipo. Ya tenía yo ganas de volver a escribir, además de que ni siquiera he podido celebrar el primer añito del blog. Espero recuperar el tiempo perdido.

Desde que dejé el blog aparcado hasta hoy, ¿qué ha pasado en el Albacete Balompié? Pues a grandes rasgos… nada.

Vamos a ver, sí han pasado cosas, ahora metemos más goles, ganamos algún partido, ¡¡incluso hemos llegado a salir del descenso!! , aunque hemos vuelto a caer en él, se ha marchado Meyong Ze igual que vino (es decir, sin ningún gol), hemos echado a Héctor Bueno, estamos a punto de echar a Juan Carlos Sanz, ha venido Alustiza sin el tránsfer, además de venir también un tal Suffo (¿o era Puffo?), antes de acabar la primera vuelta ya hemos usado a los dos porteros de la primera plantilla y a uno de los del filial, Íker Begoña a veces es sustituido (aunque sigue siendo titular indiscutible)… Todo esto a grandes rasgos en lo deportivo.

En lo institucional Antonio López Alfaro llegó a un acuerdo con el club y se acabó la famosa querella por su parte, Rafael Candel se ofreció para coger las riendas del club (si los de dentro se lo pedían, si no nada, y así ha pasado), hubo una Junta General de Accionistas en la que hubo mucho ladrido y pocas mordeduras (vamos, esto como en todos los años anteriores), Máximo Hernández sigue al frente de la Dirección Deportiva y ha empezado a traer jugadores sin verlos en directo (algo que dijo que nunca hacía, alguna vez tendría que ser la primera, ahora los ve en DVD)…

Vamos, que el Alba sigue en puestos de descenso sin apenas jugar a nada, no hay ninguna medida que se haya tomado para darle un vuelco a la situación, los jugadores que se traen en este mercado de invierno son suplentes de la Segunda división argentina o de vuelta de todo (y eso que aún faltan dos jugadores más de los cuatro fichajes contrastados que se prometieron en la famosa Junta…) y el entrenador sigue siendo el mismo con sus ideas (o las de Máximo y Panadero) plasmadas sobre el terreno de juego.

Bueno, algo sí que ha cambiado, ahora tenemos mucho menos tiempo de reacción y más cerca el pozo de la Segunda B… o el camino de la desaparición.

Por cierto, perdí mi apuesta sobre Quique Hernández y los turrones. Seguro que en cualquier otro equipo la habría ganado, pero ya se sabe…

EL ALBA IS DIFFERENT.

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