El último partido en casa dinamitó la ilusión de mucha gente que se dio cita en el Carlos Belmonte, y ya no por el resultado y por otra derrota ante un equipo como el Cádiz CF que apenas se esforzó para llevarse los 3 puntos, si no por las sensaciones que transmitió este Albacete Balompié.
Bien es cierto que quizás la plantilla no está tan compensada como parecía en pretemporada, pero también es cierto que muchos de los jugadores que llegaron traían un currículum y una buena reputación a sus espaldas (preguntemos a aficionados de
Y no solo es que encajemos goles en todos los partidos, es que Pepe Murcia no ha dado con un once fijo en el que se vayan cambiando algún jugador de vez en cuando (en seis partidos ya hemos tenido 19 jugadores como titulares, de 25 que hay en plantilla) y además, tampoco ha dado con un estilo definido de juego. Unas veces con un delantero y un mediapunta, otras veces con dos delanteros, una veces jugando por el centro, otras por las bandas…
Realmente al principio de conocer la contratación del nuevo entrenador no terminó de convencerme, no me gustaba y su currículum no me decía nada. Tras ver la plantilla que se le confeccionó, escuchar sus declaraciones, la ilusión de alrededor me embriagó y decidí darle confianza, pensé que sacaría adelante este nuevo proyecto con muy buenos resultados. Pues ahora mismo pienso lo mismo que cuando le contrataron.
Quizás sea pronto aún para cuestionar al mister y haya que darle un margen de confianza un poco mayor, quizás sea cierto que es necesario apuntalar la defensa (Iván Helguera e Íker Begoña están en el paro y nos sobra una ficha…), quizás haya que esperar a que el equipo se acople mejor y se defina un estilo de juego, pero por favor, debe ser cuanto antes, no puede ser que ya andemos a 2 puntos del descenso, como en los dos últimos años.
Seguiré unos partidos esperando una reacción positiva.
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